Vagos bien pagados
No creo que haya en el mundo trabajador más inútil que un legislador panameño de nuestros días: casi nunca van a la Asamblea, casi nunca hay quorum. Sus salarios, sin embargo, son los mejores del país: ganan más que un príncipe y trabajan menos que un vago.
El BID patrocinó un foro para discutir el tema de la ética legislativa y el ausentismo de los legisladores. ¡Adivinaste!: los legisladores se ausentaron del foro, para evitar la fatiga.
Un periodista le preguntó a Gerardo González sobre la razón del ausentismo de los legisladores en los comité de la Asamblea. Gerardo se sintió profundamente herido en el fondo de su majestad y de su santa moral por tan irreverente pregunta. Así, luego de despotricar contra el periodista, contestó sabiamente: "Para eso están los suplentes". ¡Claro! Magnífica respuesta, que pinta de pie a cabeza al dueño de la lengua que la pronunció. Si ese es el Presidente de la Asamblea, ¡qué esperar de los que sólo son miembros de la piara! Lo que olvidó mencionar monsieur Gerard es que los suplentes también se ausentan.
Eso sí: a la hora de cobrar el cheque, su asistencia es impecable.
Roberto Pérez-Franco
18/Jun/1998